
Santiago de Cali, 6 de febrero de 2025. La elección de Natalia Saray Carreño Gómez, como presidenta de la Federación Colombiana de Hapkido, ha puesto un punto alto para la dirigencia deportiva de las regiones, al lograr escalar hasta el cargo más importante de la disciplina, con esta dirigente vallecaucana, de reconocida trayectoria deportiva y gran referente de las artes marciales a nivel nacional e internacional.
Natalia Saray, asumió la presidencia en momentos en que el Ministerio del Deporte mantiene la decisión de excluir el hapkido de los Juegos Nacionales del 2027, ante lo cual considera “hay que insistir para lograr que sea incluido en todas las competencias nacionales, entre ellas los Nacionales, por su aporte social, educativo y deportivo a los atletas”.
Sobre su vida y sus logros, la presidenta afirma que tiene tres grandes razones que la inspiran a seguir convirtiéndose en la dirigente que es hoy: Una de ellas, su amor por esta disciplina que nació cuando llegó a su vida a través de un primo que vino desde Estados Unidos a dictar clases de Jiu-jitsu a la Liga Vallecaucana de Hapkido, y desde ese momento se enamoró. Entre amor e inspiración, fue cosechando logros, como el convertirse en campeona nacional y subcampeona panamericana en el 2011.
Otra de las razones que la inspiran, son sus hijos; Sofía, Saray y Emmanuel. Recuerda que su primer embarazo en plena competencia, fue un aliciente muy importante que la motivó durante sus destacadas participaciones para dar lo mejor de ella.
Y así como conquistó sus primeros títulos deportivos, logró también destacarse como dirigente en la Liga Vallecaucana de Hapkido, gracias a su trabajo en equipo y al amor por esta disciplina. Al Comité Ejecutivo de la Liga llegó en el 2013 como tesorera y por su gran desempeño se convirtió en presidenta en el 2017.
Natalia Carreño es profesional e de la Escuela Nacional del Deporte, especialista en Gerencia de Proyectos, orienta los programas de altos logros en la Secretaría del Deporte de Cali y el año 2025 le llegó con la distinción más importante, como lo es liderar la Federación Colombiana de Hapkido.
Ella es Orgullo Vallecaucano del Paraíso del Deporte, que representa la capacidad dirigencial de su Departamento, del cual afirma, “El Valle del Cauca es potencia nacional en Hapkido y considero que eso debe replicarse en las demás regiones para fortalecer nuestro deporte. Todas estas habilidades y competencias adquiridas como dirigente son las que me han llevado a tener el reconocimiento y la confianza de los demás dirigentes de Colombia que, en la Asamblea de la Federación, tomaron la decisión para estar ahora representado a nivel nacional al Hapkido desde la presidencia”, expresa.
De sus experiencias comparte la reflexión, de que “el deporte transforma vidas y las artes marciales como el Hapkido no solo consisten en dar patadas o puños, sino que sirven para canalizar la energía de niños y adolescentes, con la finalidad de lograr el desarrollo integral del deportista desde su interior para formar ciudadanos útiles en la sociedad”.